SE
NECESITARON CINCO AÑOS
Como una opinión de sólo ocho comentarios llega hoy a la agenda
internacional
Dr.
Jorge O Galíndez
Hace ya casi cinco años, en
junio del 2021, me sume al debate que iba creciendo en el ámbito científico y
académico internacional sobre el papel de la Organización Mundial de la Salud
en la crisis del Covid-19 publicando desde mi blog una postura crítica.
Lamentablemente, y como en otras tantas cuestiones relevantes, las advertencias
que sonaron fueron ignoradas por las autoridades de entonces, responsables del
manejo de la pandemia.
https://bit.ly/ElFuturoDeLaOMS
Hoy observo con recatada
satisfacción que nuestro desoído llamado de atención se ha incorporado a la
agenda mundial.
La decisión del Presidente
Donald Trump de alejarse de la OMS y la inmediata alineación de nuestro país a la
postura de norteamericana han despertado, como era de esperarse, las más
variadas reacciones de líderes mundiales tanto a favor como en contra de tamaño
Decreto.
Ahora bien, cual debería ser nuestra posición para aprovechar
esta movida políticamente tan disruptiva?
No dudo que debamos volver a proponer los cambios que a todas luces, en su momento, se estimaron necesarios y que observáramos y puntualizáramos. La obsolescencia y su paquidérmica burocracia que quedaron en descubierto en los inicios de la epidemia deben ser drásticamente modificadas generando una nueva entidad que sea una guía técnico-científica que pueda sumarse a la que impulsa tan potentemente la política.
Nuestro objetivo debe ser que esta nueva realidad no se quede solamente en las grandes definiciones políticas o en el terreno de las grandilocuentes manifestaciones verbales y que como consecuencia se desaproveche la gran oportunidad en la que nos encontramos.
Repasemos por
un momento lo expresado en aquella vieja editorial del 2021 y hoy tan actual como
premonitoria
“Con la mirada puesta en el futuro se plantea hoy la creación de
una Convención Mundial de Seguridad en la Salud Pública que debería
constituirse en referencia insoslayable para una acción colectiva,
unificada, respaldada y apoyada por todas las naciones.
Este nuevo “Gobierno Mundial en relación a las Pandemias” ha sido pensado
como una institución independiente de toda influencia, con capacidad
de respuesta objetiva, rápida, y fundamentalmente, con financiación propia y
sustentable que le permita superar ágilmente los obstáculos que las
paquidérmicas burocracias y los intereses políticos contrapuestos
históricamente han generado”.
Argentina ha expresado su
compromiso, tiene la vocación y la idea es
ser protagonista pero para ello debe básicamente, sobre el fondo real e
imprescindible de la política, proponer ideas
y proyectos superadores como los enunciados hace ya cinco años pero que
mantienen hoy, creo, total vigencia.
*Jefe del
Servicio de Clínica Médica del Hospital Eva Perón